¿Cuánto Cuesta un Abogado Inmobiliario?
Los abogados inmobiliarios en Chile suelen cobrar desde los $50.000 hasta los $150.000 pesos aproximadamente. Estos precios pueden variar según diferentes factores, tales como el tipo de propiedad, la complejidad del caso, la experiencia y reputación del abogado, el tiempo estimado de dedicación, y los gastos adicionales asociados como inscripciones y trámites notariales.
Un abogado inmobiliario es un profesional del derecho especializado en asuntos relacionados con bienes raíces. Su trabajo incluye la asesoría y representación en la compra, venta, arrendamiento y administración de propiedades, así como en la resolución de disputas y litigios inmobiliarios.
Este servicio sirve para asegurar que todas las transacciones y operaciones inmobiliarias se realicen de acuerdo con la ley, protegiendo los intereses de sus clientes. Esto incluye la revisión y redacción de contratos, la realización de estudios de títulos para verificar la propiedad y la ausencia de gravámenes, y la asesoría en temas como hipotecas, impuestos y derechos de propiedad.
Factores de precio
Algunos abogados inmobiliarios tienen un precio por hora, pero comúnmente lo hacen con un costo fijo para cierto tipo de servicios, como la elaboración de contratos y documentos de compra-venta. Por ejemplo, hay abogados que cobran el mismo precio sin importar el costo de la casa y además ofrecen paquetes para los compradores que los contraten tanto para el proceso de compra de la nueva casa, así como también la venta de la anterior.
Como cliente puedes fijar límites con respecto a la cantidad de horas que el abogado te dedicará, preferiblemente dejarlo por escrito en el contrato de manera que evites un número interminable de horas de trabajo. Muchos abogados ofrecen una consulta gratuita antes de firmar el contrato que te puede servir para tener una idea inicial de qué hacer con tu caso.
Aunque la compra y venta de una propiedad no siempre requiere la ayuda de un abogado inmobiliario, es muy útil contar con uno cuando surgen problemas que no puedan ser manejados por un agente inmobiliario o por un particular, como lidiar con desalojo de inquilinos o acuerdos de arriendo inusuales.
Asimismo, algunos documentos hipotecarios son lo suficiente complicados como para requerir asesoría legal. Dependiendo de cuánta ayuda necesites, el profesional puede cobrar un precio por hora o un monto fijo por el servicio.
Tipo de servicios
Los abogados inmobiliarios están capacitados para manejar todos los asuntos legales relacionados con bienes raíces, incluyendo transacciones, regularizaciones a través del Ministerio de Bienes Raíces, entre otros. Estos abogados están a cargo de escribir y revisar contratos de compra, documentos de traspaso, además de asegurarse de que la transferencia de propiedad sea legal y ayudar a los clientes a cumplir con el proceso necesario para hacerse dueño de una propiedad.
Algunos servicios que ofrecen son:
- Estudio de títulos: Es una evaluación importante que se realiza a cualquier propiedad debido a que determina quien es el verdadero dueño del inmueble, revisa si hay algún problema a nivel legal que deba resolverse, certifica que nadie más pueda reclamar más adelante derechos referentes al inmueble y garantiza que el dueño haga lo que desee con su propiedad ya sea que la venda, la traspase, la arriende o sencillamente la deje tal como está.
Toda la información que necesita saber la persona que posee la propiedad se redactará en un informe bajo la responsabilidad de un abogado inmobiliario que cobrará 8 Unidades de Fomento (UF) aproximadamente, pudiendo ser menos o más, según lo que considere el abogado. - Juicio de arrendamiento: En ocasiones algunos inquilinos no quieren abandonar la casa o apartamento aun cuando se haya vencido el contrato de arriendo. O tal vez el inquilino argumenta haber hecho un pago que el dueño de la vivienda afirma no haber recibido, por lo que se presenta un problema que debe resolverse en un tribunal.
En los casos más extremos se necesita el apoyo de las fuerzas de seguridad públicas (Carabineros) para sacar a los inquilinos del inmueble, aunque es factible llegar a un acuerdo sin necesidad de que la situación empeore tanto. - Juicio de precario: Se conoce como precario toda posesión de un inmueble ajeno sin un contrato ni un instrumento legal que justifique la presencia del tercero no autorizado. Es parecido a los juicios de arriendo en el sentido de que existe una vivienda ocupada por alguien que no debe estar ahí, con la diferencia de que en un juicio de precario no existe ningún acuerdo de arriendo ni nada por el estilo, por lo que el objetivo principal del abogado inmobiliario es determinar la correcta posesión de parte del dueño para que se le restituya su propiedad.
- Legalización de la compra de un inmueble: Corresponde a la inscripción en el Conservador de Bienes Raíces de la escritura donde conste que se hizo una venta de un apartamento o una casa. La idea es poder constatar que ahora el inmueble tiene un nuevo dueño para que apliquen todos los efectos legales, como la capacidad de disponer de la vivienda como mejor le parezca.
El costo suele corresponder al 0,2% del precio de venta y si hay hipotecas puede subir al 0,8% del valor de la transacción, por concepto de la documentación extra que se requiere.
Solicita a tu agente inmobiliario que te recomiende a un abogado inmobiliario experimentado y a partir de allí realiza tu búsqueda en internet. Por ejemplo, si estás comprando o vendiendo una casa, asegúrate de que el abogado tenga conocimiento en esta área y que pueda representar tanto a compradores como a vendedores, incluyendo contratos de arrendamiento y extensión de arriendo.
Aspectos generales a considerar
Existen algunos otros gastos que deberías de tener en consideración al contratar a un profesional, estos son:
- Valor de tasación: Se refiere al avalúo que realiza un profesional con el fin de obtener un precio estimado del inmueble que se desea comprar. Existe la posibilidad de contratar a uno por cuenta propia o que el banco que otorgue el crédito facilite el contacto, aunque de todas maneras el costo del servicio lo cubre la persona interesada en comprar la propiedad, y puede ir de 2 a 5 UF dependiendo de varios factores como el tipo de propiedad, el banco, etc.
- Impuestos de estampillas y timbres: Abarcan todos los aranceles que se deben pagar al Estado por concepto de oficializar las gestiones propias de comprar, vender, traspasar y hacer cualquier otro tipo de trámite. A veces ese pago se hace a través de terceros (como un banco) y dicha institución está en el deber de hacerle llegar esos fondos a los organismos gubernamentales.
- Seguros contra desastres naturales: Es de gran importancia proteger la propiedad con algún seguro inmobiliario que responda en caso de eventualidades. De existir un crédito hipotecario sobre el inmueble, es obligatorio contar con uno que se puede pagar directamente al banco (resultando en cuotas más caras) o mediante una empresa aseguradora privada que preferiblemente cubra terremotos, incendios, entre otras tragedias.
Consejos profesionales
Al contratar a un profesional en este rubro, deberías tomar en cuenta algunos consejos, estos son:
- Verifica que el abogado tenga experiencia específica en derecho inmobiliario y en el tipo de transacción o problema que quieres resolver.
- Investiga su reputación, buscando referencias de clientes anteriores y revisando opiniones en línea.
- Pide un presupuesto detallado que incluya todos los posibles costos y trata de entender su estructura de honorarios.
- Busca un abogado con conocimiento de las leyes y regulaciones locales, estos son más efectivos y eficientes.
- Revisa todos los contratos y documentos que el abogado te presente antes de firmar, y no dudes en pedir aclaraciones sobre cualquier punto.
Vale recalcar, que los abogados inmobiliarios son cruciales para asegurar que las transacciones y operaciones relacionadas con bienes raíces se realicen de manera legal y segura, protegiendo los intereses de los clientes y evitando futuros problemas legales y financieros.