¿Cuánto Cuesta un Abogado Tributario?
En promedio, un abogado tributario puede cobrar un precio fijo por el servicio prestado o un costo por hora. Los precios por hora varían entre los $50.000 y $150.000 pesos por hora. Estos precios varían según diferentes factores, tales como la complejidad del caso, el tipo de servicio requerido, la experiencia y reputación del profesional, entre otros factores.
Un abogado tributario es un profesional del derecho especializado en asuntos fiscales y tributarios. Su principal objetivo es asesorar y representar tanto a individuos como a empresas en cuestiones relacionadas con impuestos y obligaciones fiscales. Estos abogados manejan temas como planificación fiscal, auditorías tributarias, disputas con el Servicio de Impuestos Internos (SII), cumplimiento de normativas fiscales y estrategias para minimizar cargas impositivas.
Estos profesionales ayudan a los clientes a entender y cumplir con sus obligaciones fiscales, presentar reclamaciones o defensas ante auditorías del SII, diseñar estructuras fiscales eficientes y representar a los clientes en tribunales fiscales. Para las empresas, estos abogados ofrecen asesoramiento sobre cómo cumplir con las leyes fiscales, optimizar la carga tributaria y gestionar riesgos fiscales.
Factores de precio
Los costos de contratar a un abogado tributario pueden variar dependiendo de varios factores como la experiencia del abogado y la complejidad del caso. Los que tienen más años de experiencia y una buena reputación suelen cobrar valores más altos. Además, los casos más complejos que requieren más tiempo y esfuerzo, como disputas fiscales con el Servicio de Impuestos Internos (SII) o planificación fiscal para grandes empresas, tienden a ser más costosos.
Vale mencionar que los abogados tributarios cobran de diferentes maneras, algunos ofrecen precios fijos para servicios específicos como la revisión de declaraciones fiscales, mientras que otros cobran por hora, con costos que oscilan entre los $50.000 y 1500,000 pesos o más por hora.
En algunos casos, los abogados pueden trabajar a cambio de un porcentaje del ahorro fiscal obtenido, que puede variar entre el 5% y el 20% del monto ahorrado. Igualmente, es común que los abogados ofrezcan servicios de asesoría continua para clientes que requieren asesoramiento fiscal constante, con costos mensuales que varían entre los $500,000 y 2,000,000 de pesos.
Si un cliente solicita un abogado a último momento y el caso requiere mucho trabajo en un corto período de tiempo o si el caso es particularmente complejo, los costos serán más altos. Los abogados tributarios están disponibles para asesorías, consejos o representación legal en todos los aspectos de las leyes tributarias. Pueden trabajar con personas particulares, empresas y organizaciones sin fines de lucro.
Servicios
Algunas de las razones más comunes para contratar a un abogado tributarista son:
- Deudas de impuestos que una persona particular o una empresa no puede pagar.
- Representación ante el Servicio de Impuestos Interno (SII) o la Tesorería en caso de deudas.
- Representación de auditoría.
Los abogados tributarios de igual forma ayudan con impuestos generales, fiscalizaciones, embargos, problemas con pago de nóminas e inconvenientes relacionados con fraude. De igual forma, estos abogados pueden ofrecer orientación si vas a crear una empresa y así ayudarte a comprender las responsabilidades tributarias.
Con respecto a los organismos públicos, la Tesorería General de la República es el ente encargado de recaudar los tributos y demás entradas fiscales, además de custodiar los fondos recaudados y otros valores a su cargo. Por su parte, el SII es una institución pública que procura que cada contribuyente cumpla con sus obligaciones tributarias; un abogado tributario puede brindarte asesoría o representación legal ante ambos organismos, ya sea que quieras simplemente asesoramiento para realizar los procesos o tal vez prefieras que el abogado los haga por ti.
Cobranza de impuestos
Un abogado tributario es un profesional experto y capacitado específicamente en el área tributaria, por lo que probablemente tendrá experiencia en el rubro y habrá trabajado con diferentes clientes con distintas necesidades. Es buena idea contratar a un abogado tributario para orientarte a pagar todas las obligaciones o, en última instancia, asesorarte durante el proceso de cobranza de impuestos.
De acuerdo a la Tesorería, hay tres etapas que constituyen el proceso de la cobranza de impuestos:
- Cobranza administrativa: Se realiza ante la Tesorería Provincial cuando una persona es declarada como deudora por dicho organismo, por lo que se envían comunicaciones de cobro administrativas, telefónicas, por mensaje, carta y/o correo electrónico, instándole a los contribuyentes a pagar sus deudas. El nombre del deudor queda registrado en una lista firmada por el Tesorero Comunal junto con los demás detalles que permitan localizar al moroso, lo que incluye su dirección, nombre completo y cantidad que debe.
- Primera etapa de cobranza judicial: Al terminar la anterior parte se despacha el “Mandamiento de Ejecución y Embargo” por el Tesorero Regional o Provincial correspondiente, emitiendo una notificación que exija el requerimiento del pago y si no se realiza, tocará embargar los suficientes bienes que garanticen el pago de la deuda. Se divide en dos fases:
a) Mandamiento de ejecución y embargo: es la primera acción del Tesorero Regional o Provincial donde ordena a un Recaudador Fiscal notificar, requerir el pago y trabar embargo sobre los bienes de la persona.
b) Excepción del cobro: si el contribuyente tiene justificación, puede solicitar una excepción por el cobro y realizar el trámite ante la Tesorería dentro de los próximos 10 días hábiles desde el requerimiento de pago. - Segunda etapa de cobranza judicial: Se lleva a cabo ante el Juez de letras competente en lo civil correspondiente al domicilio del demandado y se inicia cuando se solicitan acciones como:
- Remate de los bienes embargados.
- Retiro de activos embargados y designación del martillero (persona que remata los bienes).
- Solicitud de remate de los bienes raíces embargados.
- Petición de orden de arresto por impuesto de retención o por no presentación de la declaración jurada de sus bienes (en caso de ser necesario).
Embargos
Por lo delicado que resulta este asunto, es altamente recomendable contar con un abogado tributario para que sirva de apoyo, y en el mejor de los casos logre anular el embargo.
Vale decir que para que exista un embargo se requiere una autorización a través de un juicio ejecutivo y una orden judicial emitida por un juez. Un juicio ejecutivo es un tipo de juicio que busca confirmar la existencia de deudas a favor de un acreedor, permitiéndole cobrar el dinero adeudado y en caso de que no lo reciba, es libre de iniciar un proceso que resulte en el embargo de los bienes del deudor, para recuperar el dinero perdido.
Es posible que un tercero obstaculice el procedimiento si, por ejemplo, vive con la persona que van a embargar y dice que algunas de las cosas son de su propiedad. Tal acción se conoce como traba del embargo, que también puede presentarse cuando una persona argumenta en un juicio que el embargo lo afectaría de alguna manera. No obstante, nada de eso le quita validez a la gestión del embargo.
Es importante recordar que si una persona se niega al embargo puede que los Carabineros vayan a su casa a realizar la diligencia, aparte de que la oposición al embargo pudiera ser una agravante en el caso del deudor.
Perfil del abogado tributario
Es una persona metódica que busca dar cumplimiento a cada una de las normativas del Derecho Tributario, además de tener paciencia debido a que las gestiones pueden demorar cierto tiempo.
También posee conocimientos avanzados de las leyes tributarias chilenas, aparte de experiencia al manejarse en entes públicos como el Servicio de Impuestos Interno o la Tesorería.
Como buen abogado debe saber argumentar con precisión para poder defender a su representado con propiedad ante un juez, ser capaz de refutar cualquier acusación que pese contra él y formular un caso que impulse los intereses de su cliente, tal y como pasaría en cualquier rama del Derecho.
De la misma forma está en la obligación de mantenerse actualizado en todo lo referente a las nuevas normativas y leyes que surjan, teniendo en cuenta que cualquier novedad puede cambiar la manera en que maneje ciertos casos.
Consejos profesionales
Algunos consejos que deberías tomar en cuenta al contratar a un profesional tributario, son los siguientes:
- Busca un abogado con experiencia comprobada en derecho tributario y casos similares al tuyo.
- Investiga la reputación del abogado o firma. Revisa opiniones de otros clientes y verifica su historial de éxito en casos tributarios.
- Pregunta y entiende claramente cómo cobrará el abogado (por hora, precio fijo, porcentaje de ahorro fiscal) y cualquier costo adicional.
- Muchos abogados ofrecen una primera consulta gratuita. Aprovecha esta oportunidad para discutir tu caso y evaluar si el abogado es adecuado para ti.
- Pide referencias a amigos, familiares o colegas que hayan tenido experiencias similares. Las recomendaciones personales pueden ser valiosas.
- Procura que el abogado esté al tanto de las últimas actualizaciones en leyes tributarias. Las leyes pueden cambiar, y es importante que tu abogado tenga conocimientos actualizados.
- Además de ser buenos litigantes, los abogados tributarios deben ser excelentes negociadores. Pregunta sobre su experiencia en negociaciones fuera de la corte.
Contratar a un abogado tributario es crucial para asegurar el cumplimiento de las obligaciones fiscales y optimizar la situación tributaria. Estos profesionales tienen el conocimiento y la experiencia necesarios para manejar la complejidad de las leyes fiscales y ofrecer asesoramiento adecuado. Ya sea para resolver disputas fiscales, planificar impuestos de manera eficiente o representarte en juicios tributarios, un abogado tributario puede ayudarte a evitar sanciones y optimizar tus obligaciones fiscales.