¿Cuánto Cuesta Instalar una Cerradura?
Por lo general, instalar una cerradura puede costar entre $15.000 y $40.000 pesos. Varios factores influyen en el precio como el tipo de cerradura, tu ubicación, si es una urgencia o no, la experiencia del cerrajero, el estado en el que se encuentre la puerta y cualquier otro servicio adicional que necesites.
La mayoría de las veces el servicio incluye desinstalar la cerradura anterior (si es que existe), perforar la puerta, instalar la cerradura que se desee colocar, hacer varias pruebas y desechar los residuos de polvo o suciedad que podrían surgir. Esto puede variar, debido a que no todos los cerrajeros trabajan de la misma forma.
Muchos de los cerrajeros siguen una serie de pasos al momento de instalar la cerradura o aplican diversos métodos con el fin de que el trabajo quede bien hecho. Vale decir que la instalación implica utilizar diversas herramientas como el taladro, el atornillador y la huincha de medir, así que completar esta labor exige cierto conocimiento técnico.
Factores de precio
Es probable que el cerrajero tenga un horario de trabajo establecido, además de una zona en la que acostumbra trabajar, por lo que si debe hacer alguna instalación de cerradura fuera de ese horario y de esa zona, seguramente cobre un recargo, especialmente si es fin de semana o un feriado. Por lo general, mientras más tarde sea y más lejos quede el lugar de donde trabaje el cerrajero, mayor será el precio del servicio.
Por otra parte, no todas las cerraduras son iguales, algunas requieren más habilidades que otras en su proceso de instalación. Lo que significa que el precio de la instalación de tu cerradura puede variar de acuerdo a la dificultad del servicio.
Asimismo, un cerrajero con años de experiencia generalmente cobrará más que uno que apenas está comenzando a prestar sus servicios, pero esto no necesariamente implica que un cerrajero experimentado trabaje mejor que uno que esté empezando con este oficio.
Ten en cuenta que el costo del servicio no incluye la cerradura que quieras colocar, ni tampoco cualquier reparación que se le deba hacer a la puerta, en caso de que esté en muy mal estado.
Tipos de cerraduras
Actualmente existen diferentes cerraduras, de manera que puedes escoger la que mas se adecúe a tus necesidades y presupuesto:
- Cerraduras tubulares: Es un tipo de cerradura que se puede ver en algunas vitrinas de tiendas de lujo, porque la chapa permite cerrar la puerta al presionar un botón desde el interior de la habitación. También se acostumbra a usar en baños y en algunos archivadores de oficina, por ser mucho más económica que los otros tipos de cerraduras, aparte de que resulta muy práctica para muchos usos.
- Cerraduras empotradas o embutidas: Representa una de las cerraduras más seguras, puesto que generalmente están instaladas por dentro de la puerta, por lo que generalmente solo es posible observar el agujero donde se introduce la llave, complicando así que otra persona vulnere el mecanismo de la cerradura. Algunos modelos facilitan la implementación de métodos adicionales de seguridad en la misma cerradura, en pro de fortalecer la seguridad que ofrece.
- Cerraduras de sobreponer: Si bien este tipo de chapas para puerta tiene la ventaja de que se puede utilizar fácilmente, (especialmente cuando está ubicada en portones o rejas), su principal desventaja es que no es muy segura. La razón es porque la chapa queda expuesta, por estar completamente instalada en la parte de afuera de la puerta, a diferencia de las demás cerraduras, las cuales normalmente solo tienen una parte que está visible en el exterior de la puerta.
- Cerraduras digitales: Son uno de los tipos de cerraduras más modernos, debido a que utilizan un sistema de claves integrado en el cerrojo, por lo que solo se necesita utilizar las llaves cuando las baterías se hayan descargado o se presente cualquier otra eventualidad. Es común verlas en habitaciones de posadas y hoteles, así como en cajas fuertes, porque se basan en un circuito electrónico protegido por clave para impedir el acceso a personas no autorizadas.
Independientemente del tipo de cerradura que escojas, lo ideal es que cuentes con el apoyo de un cerrajero que te asesore y realice todo el trabajo de instalación. De esta forma puedes asegurarte de que todo funcione de la mejor manera.
Aspectos generales a considerar
Algunos cerrajeros que trabajan en tiendas solo instalan cerraduras que se hayan comprado en esos mismos negocios, debido a que generalmente la instalación está incluida en el precio del producto. En caso de que trabajen con una cerradura comprada en otro lugar, puede que no ofrezcan garantía, ya que no pueden comprobar si la cerradura es realmente buena.
Si tienes contratado un seguro para tu casa o departamento, es probable que cubran la instalación de cerradura, siempre y cuando forme parte del acuerdo que hayan contraído contigo. De ser así, solicítale una boleta al cerrajero para que quede constancia del trabajo que vaya a realizar y del monto que piense cobrar, de manera que la compañía aseguradora pueda proceder con el reembolso.
A diferencia de otros trabajos que se realizan en el hogar para los que generalmente se necesitan permisos, como las ampliaciones o remodelaciones, instalar una nueva cerradura no necesita contar con autorización de terceros (siempre y cuando seas el dueño de la propiedad, evidentemente).
Consejos profesionales
Ten en cuenta los siguientes consejos junto con la información entregada anteriormente, para que sepas que puedes esperar del servicio:
- En caso de que la chapa de tu puerta principal no esté en buenas condiciones, considera cambiar la cerradura por una más segura
- Ten presente que si decides instalar una cerradura digital y quieres autorizar el acceso a otras personas, solo debes crear un usuario, sin necesidad de decirles el código maestro (la clave principal)
- Si en el momento no cuentas con los recursos suficientes para cubrir la instalación, pregunta por planes de financiamiento
- A veces solo hay que cambiar el bombín o el cerrojo para que la cerradura que tengas funcione mejor (si es que está dañada), pero casi siempre se necesita arreglarla o cambiarla por una nueva.