¿Cuánto Cuesta Colocarle un Microchip a una Mascota?
Generalmente, colocarle el microchip a una mascota cuesta entre los $10.000 y $50.000 pesos. Estos precios pueden variar dependiendo de diferentes factores, tales como la urgencia con la que requieras el servicio, tu ubicación (si es a domicilio), la experiencia del veterinario y si solicitas servicios adicionales.
Si bien, algunos dueños de mascotas podrían ellos mismos intentar ponerle el chip a su mascota, no es recomendable porque podrían lastimarla, aparte de que implica adquirir ciertos aparatos especiales que cumplan con normas específicas como la ISO 11784 y saber hacer el procedimiento correctamente. Lo ideal es llevar a la mascota con el veterinario, ya que normalmente él es un profesional capacitado que sabe cómo atender a las mascotas y colocarles el chip de la forma correcta.
El microchip que se implanta en los perros o gatos se diferencia al que se pone en otras mascotas, debido a que está hecho de materiales biocompatibles, lo que significa que se integran al cuerpo de la mascota sin perjudicar su salud. Además, su única función es almacenar un código de 15 dígitos que se utiliza para registrar al animal en el Registro Nacional de Tenencia Responsable de Mascotas o Animales de Compañía, por lo que no se puede usar el chip para localizar a la mascota o realizar cualquier otra función.
El procedimiento consiste en una inyección subcutánea o por debajo de la piel, cerca de la espalda y los huesos escapulares con una aguja que contiene el chip. La colocación del microchip suele durar unos segundos nada más y después de que haga el procedimiento, se debe pedir el certificado que deja constancia de que se le implantó el chip a la mascota.
Factores de precio
Es posible que en algunas comunas implanten el chip gratis en algunas jornadas de atención veterinaria gratuitas, pero posiblemente haya que estar pendiente de los anuncios que puedan hacer los encargados de dichas jornadas, aparte de cumplir con las condiciones que establezcan para el servicio (llegar a cierta hora, llevar a la mascota enjaulada, entre otros posibles requisitos).
Vale decir, que en muchas clínicas veterinarias no venden el chip ni el dispositivo que se utiliza para implantarlo, por lo que es mucho más fácil (y hasta más económico) contratar el servicio que intentar hacerlo por cuenta propia. En caso de que se haya comprado un perro o gato, es probable que este ya tenga el microchip implantado, por lo que puedes solicitar el certificado que casi siempre entregan después del implante.
En caso de que necesites asistencia con el proceso de inscribir a la mascota en el Registro Nacional de Tenencia Responsable de Mascotas o Animales de Compañía, algunos veterinarios ofrecen el servicio de lectura del chip y la asesoría para completar la inscripción por un costo específico. Ten en cuenta que si bien colocarle el chip a la mascota no es obligatorio (también se puede identificar de forma externa), sí es necesario inscribirla en el registro antes mencionado.
Si dejas a la mascota en la clínica, se recomienda estar pendiente de pasar recogiendo a la mascota a la hora que indique el veterinario, ya que de lo contrario podrían aplicar un costo adicional si la mascota se queda hasta tarde. Y si se pasa de ese tiempo, existe el riesgo de que la clínica veterinaria demande al dueño por abandono del animal.
El valor de colocarle el microchip a una mascota no varía según el tipo de mascota, así sea que tenga alguna condición de salud o tenga alguna otra característica. La implantación del chip generalmente es un procedimiento rápido y sencillo que no requiere anestesia porque la mascota no suele sentir dolor, ya que el microchip es del tamaño de un grano de arroz.
Aspectos generales a considerar
Es importante solicitar una hora con el veterinario para que le implante el microchip a la mascota, por si esta necesita otros servicios adicionales. Por ejemplo, es posible que el especialista detecte ciertos problemas de salud en el animal, que en el peor de los casos podrían requerir hospitalización o cirugía.
Generalmente, la gran mayoría de las mascotas están aptas para colocarles el microchip y son muy pocos los casos en los que existe alguna reacción adversa por la implantación del chip. A diferencia de lo que ocurre con servicios como la esterilización, en los que se debe evaluar si la mascota está en condiciones para el procedimiento y se necesita prestar atención a los efectos secundarios.
Al momento de llevar a la mascota a una clínica veterinaria, es bueno tener presente que las condiciones del servicio pueden variar, por lo que en algunos negocios podrían exigir que los dueños de mascotas lleven ciertos implementos como una toalla o una manta, aparte de la correa o arnés con que se suelen llevar a los caninos, felinos y otras mascotas. Además, algunos veterinarios podrían requerir que la mascota tenga ciertas semanas de vida, mientras que otros posiblemente no establezcan una edad específica para colocar el chip.
Consejos profesionales
Si estás pensando en colocarle el microchip a tu mascota, considera las siguientes recomendaciones:
- Lee con atención las condiciones del servicio de la clínica veterinaria donde la vayas a llevar.
- Cuando la mascota esté en consulta con el veterinario, puedes aprovechar de colocarle una vacuna, si es que le hace falta.
- Si la persona que lleva a la mascota a la clínica veterinaria no es su dueño, es indispensable que tenga un poder simple que certifique la autorización para colocarle el chip.
- Ante cualquier duda referente al cuidado de las mascotas, es prudente consultarle al veterinario y revisar lo que plantea la Ley 21.020 o “Ley Cholito”.
- Es posible que en las clínicas veterinarias solo permitan la entrada de una persona por mascota y que ella o él lleve la mascarilla puesta, en caso de que las restricciones relacionadas con el coronavirus continúen.
La colocación del microchip no es solo un requisito para cumplir con la ley, también sirve si se desea llevar a la mascota a un hotel para mascotas o a otro país, debido a que permite la identificación única y rápida del animal.