Las acciones a seguir ante un accidente de tránsito van a depender del medio de transporte utilizado. En cualquier caso la prioridad la tiene la persona que haya resultado afectada por el accidente, es decir, se debe tener presente realizar todos los esfuerzos posibles por socorrer a la víctima.
En este sentido hay que detener el carro, prestar primeros auxilios en la medida de lo posible e informar a los Carabineros llamando al 133 o al SAMU (Servicio de Atención Médica de Urgencias) marcando el 131.
Por cuestiones de seguridad vial se debe:
Si el accidente sucedió en una unidad de transporte público de inmediato, se debe ir a un centro asistencial para saber las lesiones producidas por el accidente. Seguidamente, el afectado o un tercero autorizado debe poner la denuncia en la comisaría que esté más cerca, indicando todos los detalles relacionados a las patentes de los vehículos involucrados, la hora y la fecha en que sucedieron los hechos. Este trámite cobra vital importancia cuando los carabineros no hayan podido presentarse en el lugar del accidente, ya que no queda constancia del evento en la comisaría.
Luego hay que dirigirse al Juzgado de Policía Local o a la Fiscalía para que evalúe el informe médico que señala las heridas del accidente, y así conseguir el certificado que constate las lesiones producidas en el hecho.
Para efectos del seguro, es recomendable guardar todas las facturas que avalen los gastos médicos, aparte de cualquier otro documento que demuestre lo que sucedió.
Es posible poner una demanda para procurar que los responsables del accidente vial se hagan cargo de los gastos que resultaron a causa del incidente.
Cuando el costo de los daños supere el valor de 4 Unidades Tributarias Mensuales (UTM) alrededor de $204.116, la demanda se debe presentar junto con un abogado. Vale decir que si se decide demandar hay que hacerlo a más tardar 3 días después de que haya ocurrido el accidente vial.
Un abogado de tránsito será capaz de saber si es prudente solicitar compensación por daños emergentes (reparación del vehículo, desvalorización del mismo), lucro cesante (por ejemplo, si el carro se usaba como taxi se puede pedir una indemnización calculando el ingreso que se vaya a perder mientras se repara el daño) y el daño moral que se refiere a todo malestar a nivel psicológico por culpa del accidente.
Si bien no todas las personas cuentan con conocimientos en este tema, es útil conocer un poco de primeros auxilios por si acaso se necesita ayudar a alguien en un accidente vial.
Se sugiere evitar en lo posible mover a la persona afectada debido a que se le puede fracturar algún hueso que haya quedado mal posicionado o peor aún, complicarle la herida producto del accidente, resultando en daños que pudieran causarle la muerte.
Si el herido no respira o lo hace de forma irregular, toca aplicarle respiración artificial (boca a boca) para oxigenar sus pulmones y asegurarse de que siga respirando.
En caso de que la víctima esté inconsciente, hay que acostarlo de lado con el fin de que no sufra de asfixia causada por su propia lengua. Además, si la víctima sangra mucho, es importante cubrir la herida con un pañuelo para evitar una mayor pérdida de sangre.
Un abogado de tránsito asiste a las personas que hayan sufrido un accidente vial, ya sean peatones, ciclistas, motociclistas o conductores, además de apoyar a los que se les averió su medio de transporte por fallas en las vías públicas.
Su objetivo principal es velar por los derechos de las víctimas de incidentes viales con la finalidad de conseguir justicia por el daño sufrido en los hechos. Dependiendo de lo que haya pasado, el abogado diseñará una estrategia que se apegue a las leyes, exigirá una compensación acorde con lo sucedido y buscará hacer responsable al causante del accidente.
Vale decir que todo tipo de daño se puede reclamar ante un juez, es decir, desde los costos del taller mecánico hasta las angustias propias de pasar por un evento accidental, incluso es posible alegar que como el vehículo estuvo en un accidente perdió valor para cuando se vaya a vender, por lo que esa potencial pérdida monetaria debe ser pagada por la persona que causó el accidente.
Cuando se trata de problemas vinculados al estado de autopistas o calles, también es factible demandar. Lo que se recomienda es registrar todo lo que pueda ser útil para la defensa en el juicio, se puede guardar material gráfico como fotos y videos, reunir testigos que puedan brindar testimonio y contar lo ocurrido de la forma más precisa posible.
Si estás por comprar un auto usado, es aconsejable que un abogado de tránsito pueda evitarte problemas en el futuro, al asegurarse de que, por ejemplo, el dueño anterior no tenga multas sin pagar que "heredarías" al adquirir su vehículo. Cabe mencionar que las deudas pasarían al nuevo dueño del carro y no guardarían relación con el propietario anterior.
Por nombrar otro caso, también puede pasar que al cargar bencina en la bencinera tu auto sufra daños por negligencia del personal que estaba trabajando en ese momento. Tal como ocurre en los casos anteriores, es recomendable contactar a un abogado de tránsito para que brinde asesoría y sepa cómo proceder para obtener una indemnización.
Es importante saber que a la hora de que te entreguen una multa de tránsito se puede apelar, siempre y cuando se sigan ciertos puntos que estipula la ley en Chile.
En caso de tener una multa más grave o un conflicto con el juez o las pruebas, es necesario buscar un abogado que te ayude al respecto y pueda guiarte respecto a lo que necesites.
