• ¿Cuánto Cuesta un Maestro en Chile?
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El término “maestro” es usado de distintas formas en diferentes lugares del mundo. En el caso de Chile, se refiere a un profesional que hace un poco de todo, lo que significa que puede hacer trabajos eléctricos o labores relacionadas con la carpintería, tabiquería, albañilería, etc. Otros servicios que un maestro puede ofrecer incluye ensamblar muebles, pintar interiores y exteriores, reparar cercas o puertas rotas, reemplazar bordes de techo, montar luces colgantes, instalar equipos electrónicos y mucho más.

En otras palabras, un maestro en Chile es un trabajador capacitado para realizar reparaciones básicas y apoyar con proyectos de construcción o remodelación en todo tipo de situaciones. 

Perfil del profesional

Aunque un maestro puede que no tenga una educación formal, sí suele contar con capacitación para hacer su trabajo:

• Experiencia laboral: Muchas veces tienen certificados y credenciales que complementan su hoja de vida. Gracias a su experiencia pueden explicar cómo han sido las modificaciones o reparaciones que hayan hecho en otras partes. Es importante asegurarse de que el profesional sepa hacer su trabajo para que todo quede bien, ya que de lo contrario podría resultar en daños a la propiedad, problemas con el maestro, además del desgaste que implica mandar a acomodar un trabajo mal hecho.
• Buena comunicación: Normalmente, el maestro expresa claramente los tiempos de la obra para así saber cuando estima comenzar y terminar su labor. Asimismo, se debe conversar que incluye el presupuesto (por ejemplo, si abarca los materiales), de cuanto tiempo es la garantía, en caso de que la ofrezca e informar muy bien lo que se quiere hacer en el sitio. Para evitar problemas es aconsejable firmar un contrato que establezca todas las pautas del trabajo, los plazos de entrega, la forma de pago, además de definir las acciones a realizar si se presenta algún inconveniente.

Si necesitas ayuda en algunas tareas o proyectos del hogar, no dudes en buscar la ayuda de un maestro profesional, estos cuentan con el conocimiento necesario para ayudarte a resolver muchas situaciones como las antes mencionadas, lo que garantiza un trabajo de alta calidad y resultados óptimos.

Instalar un soporte de TV es importante para poder disfrutar cómodamente de películas, series y programas de televisión. Es posible colocarlo en una pared o usar un soporte de techo, dependiendo del espacio disponible en la habitación y tus gustos personales.

Ten en cuenta el tamaño del televisor y el peso, en caso de que sea muy grande, puede que te convenga pedir ayuda profesional para moverlo. Asimismo, el tiempo que te puede tomar instalar todo es de 20 minutos aproximadamente, que podría ser menos si tienes habilidades para atornillar, taladrar, etc.

Herramientas necesarias

Para realizar la instalación vas a necesitar algunas herramientas de trabajo, entre las que se encuentran:

• Taladro.
• Lápiz para marcar.
• Brocas.
• Desatornillador.
• Tornillos.
• Suples.
• Huincha.
• Las piezas que podrían venir incluidas con el TV.

Pasos previos

Para asegurarte de que tu TV quede bien instalado, puedes seguir los siguientes pasos:

1. Primero que todo debes revisar en qué estado se encuentra el muro o la losa donde vayas a instalar el TV, ya que la superficie debe estar en buenas condiciones para resistir el peso del soporte y del aparato. Seguidamente, tienes que decidir el lugar exacto donde pienses instalar el televisor, por lo que te puedes ayudar con una huincha para encontrar el punto central donde se vea mejor el TV.
2. Luego debes tomar en cuenta ciertas consideraciones. Por ejemplo, al medir se puede empezar desde el piso hasta la altura deseada del televisor, sumándole los centímetros del soporte para TV, de manera que si lo quieres colocar a un metro y medio y el soporte mide 20 cm de alto, el aparato estaría a 1,70 m del suelo.
3. A lo ancho, toma medidas desde los bordes del muro hasta el centro, para que puedas conseguir el espacio ideal para tu TV. Si lo vas a instalar en la esquina para que esté aguantado por el soporte y la losa, no necesitas tomar tantas medidas, pero sí debes estar seguro de que el TV quepa en el espacio asignado. 

Es posible que algunas marcas requieran un procedimiento distinto, así que es útil revisar el manual de usuario.

Pasos según instalación

Después de realizar las tareas mencionadas anteriormente, sigue las indicaciones que apliquen según el tipo de instalación:

En muro

El soporte suele incluir dos piezas, una que va en la parte trasera del TV y otra que se coloca en el muro. La pieza que va conectada al aparato normalmente son unos “brazos” verticales que se taladran o atornillan atrás del televisor.

1. Ubica unos huecos pequeños señalados en la parte central del artefacto para saber donde poner los “brazos”.
2. Coloca el soporte del muro sobre la pared para marcar con un lápiz donde vas a taladrar. Este contiene unos agujeros por los que debes pasar unos pernos que se conectan a un anclaje tipo mariposa.
3. Luego introduces los pernos conectados al anclaje en los espacios que taladraste en el muro, para así fijar el soporte. Cuando pases el TV al soporte, no hagas mucha fuerza, ya que se puede dañar el equipo.

En losa

Esta modalidad se utiliza para colgar televisores en esquinas, por lo que la instalación puede durar un poco más de tiempo, puesto que implica anclar un brazo colgante al soporte del televisor para que lo sostenga en el aire. Son tres cosas las que se deben ensamblar por separado para luego unirlas todas: el soporte del TV, el brazo colgante y la base que se monta en la losa.

1. Empezando con el brazo, debes meter los tornillos en los agujeros que suelen estar en la parte superior del mismo.
2. Luego enroscas la base con el brazo colgante.
3. Después ensamblas la parte inferior del brazo con el soporte para TV, el cual suele ser una pieza rectangular que se atornilla a la parte de atrás del aparato.
4. Una vez que tengas listo el ensamblaje, puedes montarte en una escalera para taladrar la losa y enganchar la base junto con el brazo colgante al insertar tornillos y apretar las roscas que tenga, dependiendo del modelo de soporte. El cual, por cierto, debe estar asegurado al 100% para que pueda aguantar el peso del TV.

Recomendaciones

Cuando estés atornillando o taladrando, evita tropezarte con los cables para evitar accidentes y usa lentes de seguridad. Además, es recomendable que tengas todas las piezas en un solo lugar para que no se pierdan, especialmente las más pequeñas. 

No coloques el TV tan alto para que no resulte incómodo verlo después. Por otra parte, ponlo a cierta distancia del sofá o de la cama porque podría cansar la vista, ver de cerca un TV por muchas horas.

Si te da miedo que hagas una mala instalación y el TV se caiga después, recuerda que puedes contactar a un profesional para que te apoye y así tengas la seguridad de que el aparato se va a mantener en su sitio.

Las puertas son objetos que no pueden faltar en una casa, departamento u oficina para limitar el acceso a ciertas áreas, resguardar la privacidad de las personas y ser parte de la decoración. Por la importancia que tienen, es indispensable que al momento de colocar una sepas cómo montarla correctamente.

Lo ideal es que la puerta de madera, metal u otro material ya esté pintada antes de realizar la instalación, debido a que después puede ser más complicado pintarla con todas sus piezas instaladas.

Materiales necesarios

Puede que no necesites usar todas estas herramientas, pero no está de más que las tengas a la mano, estas pueden ser:

• Cerradura.
• Anteojos de seguridad.
• Bandeja y rodillo para pintura.
• Brocha.
• Esmalte.
• Bisagras.
• Lápiz.
• Destornilladores.
• Martillo.
• Tarugos.
• Sargento.
• Fresadora.
• Sierra circular.
• Espátula.
• Tablas de madera.
• Taladro y brocas.
• Cepillo eléctrico.
• Estuco.

Pasos previos

Antes de pasar a la instalación, se deben tomar una serie de previsiones para saber donde se instalaría la puerta, asegurarse de que exista el espacio y prevenir problemas cuando se coloque la puerta.

1. Para poder instalar una puerta fácilmente primero hay que colocar el marco correctamente. Empieza revisando el vano, que es el espacio vacío en la pared donde va la puerta, prestando especial atención a las medidas de las diagonales del vano y las condiciones del lugar donde se instalará el marco.
2. Si notas que hay un desnivel en la puerta de madera u otro material, puedes acomodarlo aplicando estuco en el área con una espátula o lijando la superficie, dependiendo de cómo sea la irregularidad.
3. En caso de que esté todo bien, puedes medir el largo y ancho del vano con una huincha para marcar las medidas y tenerlas presente al momento de cortar las tablas.
4. Debes realizar los cortes de las tablas con la sierra circular, mientras tengas puestos los anteojos de seguridad para que no te caiga nada en los ojos.
5. Una vez que cada una esté cortada, puedes pegarlas aplicando cola y atornillando 2 o 3 tornillos en cada esquina. Cuando se seque la cola, es momento de pasar la estructura al vano y revisar que esté nivelada, de manera que cuando montes la puerta de madera, aluminio o metal, ya tengas un marco que la aguante.
6. Puedes asegurar el marco en el espacio haciéndole varias perforaciones con el taladro a lo largo de los bordes verticales con una separación de 25 cm entre perforación.
7. Por último, introduces tarugos en los agujeros, que podrías atornillar para que el marco de la puerta de madera o de otro material quede fijo.

Instalación de piezas

Es posible que ya tengas un marco en el lugar donde quieras instalar la puerta, por lo que quizás no necesites colocar uno. En cualquier caso, la instalación de una puerta incluye trabajar con una serie de elementos como las bisagras y la cerradura. Puedes guiarte con las siguientes instrucciones:

Bisagras

1. La mayoría de las puertas usan 3 bisagras con una separación entre ellas de 30 centímetros aproximadamente, lo que significa que debes usar un lápiz para marcar en el borde de la puerta el sitio de cada una.
2. Luego debes utilizar la fresadora para rebajar justo en los espacios que hayas señalado anteriormente, ya que ahí deben encajar las bisagras.
3. Seguidamente, debes atornillarlas usando los tornillos que pueden venir incluidos al adquirir las bisagras. En caso de que no te sientas cómodo usando este tipo de herramientas, puedes contactar a un carpintero para que te ayude.

Cerradura

1. Inicialmente, tienes que colocarle una broca en forma de copa al taladro para abrir el espacio circular en el que va esta pieza (las brocas son las puntas que se le ponen a los taladros).
2. Después pasas al canto o borde de la puerta y tomas una broca en forma de paleta para abrir el agujero de donde sale el pestillo o seguro.
3. Una vez que hayas taladrado ambos huecos, rebajas la superficie del borde con la fresadora.
4. Luego fijas el picaporte con tornillos y montas la manilla pasando las piezas que suele incluir a través de los huecos del picaporte.
5. Finalmente, atornillas en los espacios que indique el picaporte (suelen ser unos círculos con unas aperturas mínimas para colocar el destornillador). Cuando termines de realizar todo el trabajo, asegúrate de que la puerta cierre y abra bien.

Por lo general, las puertas de madera son las más usadas en las entradas de las casas, lo cual significa que el profesional debería estar acostumbrado a trabajar con este tipo de puertas. Con respecto a las puertas corredizas, usualmente no llevan cerradura (especialmente si están en un baño), pero sí es importante que se deslicen adecuadamente sobre el riel.