¿Qué Hace un Pediatra?
Un pediatra es un profesional que se especializa en la prestación de atención médica a los niños. Estos se centran en la salud integral de bebés, niños y adolescentes, brindándoles atención tanto física como mental y emocional. Llevan a cabo pruebas de diagnóstico para obtener información sobre la condición médica del paciente y, a partir de esos resultados, prescriben tratamientos, terapias, medicamentos y vacunas para abordar enfermedades, trastornos o lesiones.
Los pediatras asesoran y orientan a los niños y padres o tutores acerca de la dieta, la higiene y la prevención de enfermedades. Esta también es una especialidad de colaboración, ya que los pediatras de atención primaria pueden enviar a los pacientes a otro especialista médico, esto en caso de que se manifiesten síntomas de una condición médica grave, con el fin de abordar de manera precisa el problema.
Funciones que realiza un pediatra
Algunas de las principales funciones que realiza un pediatra se encuentran las siguientes:
- Identificar enfermedades y recetar medicamentos para un tratamiento adecuado.
- Realizar evaluaciones periódicas para un control del desarrollo adecuado en los pacientes.
- Aplicar las vacunas necesarias de acuerdo al calendario de vacunación establecido.
- Tratar lesiones que estén dentro de su alcance y referir a los pacientes al especialista adecuado según la gravedad del traumatismo.
- Actualizar de manera constante el historial clínico de los pacientes.
Condiciones o enfermedades que tratan
Un pediatra puede tratar diferentes enfermedades o condiciones tanto en bebés, niños y adolescentes. Algunas condiciones y enfermedades que un pediatra puede tratar son:
- Resfriados.
- Asma.
- Bronquitis.
- Diarrea.
- Infecciones en la garganta.
- Neumonía.
- Micosis.
- Enfermedades infecciosas (sarampión o varicela).
El pediatra generalmente atiende a niños desde que nacen hasta los 21 años, lo que significa que siguen la salud del niño desde su nacimiento y durante toda su infancia y adolescencia hasta que llegan a la edad adulta. No obstante, existen excepciones, especialmente en casos de niños con necesidades especiales, ya que en estos casos la atención médica después de los 21 años puede variar según el médico.