La vida útil o duración de una impresora va a depender de diversos factores, tales como la marca, el modelo, la calidad de fabricación y, muy importante, el nivel de atención y mantenimiento que se le dé. Hay diferentes tipos de impresoras, por ejemplo, las de tinta y las de láser. La vida útil de estos tipos de impresoras es diferente y dependen lo los siguientes factores:
- Impresora láser: Las impresoras láser por lo general tienden a ser más duraderas que las de tinta, una impresora láser bien cuidada puede durar entre 5 y 10 años o incluso más, dependiendo de la calidad y el uso que se le vaya a dar. Este tipo de impresoras suelen ser usadas con mucha frecuencia y a menudo son preferidas en entornos de oficina debido a su durabilidad y eficiencia.
- Impresora de tinta: Este tipo de impresoras son más asequibles, pero, a diferencia de las impresoras láser, su vida útil es más corta, ya que aun siendo bien cuidada, su vida útil en promedio es de 3 a 5 años. Aunque podrían durar más tiempo si se les brinda un mantenimiento adecuado y se utilizan sus componentes de buena calidad.
Como prolongar la vida útil de una impresora
Es importante destacar que lo anterior son promedios y que la duración real de una impresora puede variar significativamente según el uso y el cuidado que reciba. Algunos consejos que te pueden ayudar a prolongar la vida útil de tu impresora son:
- Mantenciones correctas: Una impresora con una buena mantención te puede durar bastante más años, incluso, a veces ocurre que si dejamos de usar la impresora por un largo tiempo y no se le da mantención, esta pierde su funcionamiento, ya que el interior de una impresora es un poco delicado y si le entra el polvo y la suciedad puede dejar de funcionar. Hacer las limpiezas de cabezales y test de inyectores cada vez que tengamos problemas de impresión es esencial para mantener la impresora limpia en caso de las impresoras de tinta, por su parte, para las impresoras láser hay que limpiarlas por dentro para retirar el polvo de tóner que se va acumulando en su interior.
- Fuente de alimentación eléctrica: Es importante utilizar protectores de sobretensión para proteger tu impresora de caídas de voltaje y cortes de energía repentinos, ya que estos pueden dañar los circuitos internos y disminuir la vida útil.
- Uso adecuado: Aunque las impresoras suelen estar hechas para trabajos de largas jornadas y se suelen sacar impresiones con frecuencia, es fundamental evitar imprimir en exceso y utilizar el modo de ahorro de energía cuando no estés imprimiendo. Además, utiliza papel de buena calidad y colócalo adecuadamente para evitar atascos y problemas de alimentación.
- Uso de filtros de aire: Si tu impresora está ubicada en un área con bastante concentración de polvo, es relevante considerar la posibilidad de utilizar un filtro de aire en tu impresora, de esa forma podrás evitar que el polvo dañe los componentes internos de la misma.
- Si no se usan, guardarlas correctamente: Si las impresoras no se van a usar por un tiempo, ya sea por temas de vacaciones u otra razón, es recomendable que en las impresoras de tinta, retires los cartuchos y los guardes en bolsas individuales y cerradas. Por otra parte, las impresoras de láser, es recomendable taparlas con lo que tengamos a mano y desenchufarlas de la corriente y del ordenador.
La vida útil de una impresora en general puede variar por los factores antes mencionados, pero con el cuidado adecuado y siguiendo estos consejos, puedes prolongar su vida útil y obtener un rendimiento óptimo durante muchos años.