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De Viña del Mar
2 veces contratado
3 empleados
8 años de experiencia
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Opiniones
Preguntas y Respuestas
¿Cuál es tu proceso típico para trabajar con un cliente?
Tras la primera consulta:
1.- Se formula una propuesta formal de servicios y honorarios por escrito, la cual se mantiene con una vigencia de 5 días.
2.- En caso de ser aceptada, con la formula de honorarios propuesta, se trabaja conforme a las cláusulas contractuales, pactandose fechas de entrega de información relevante a la gestión, estableciendose horarios y días para tales efectos, forma de pago de saldo restante, dentro de otros item que se incorporaron en contrato.
3.- Se suscribe mandato judicial, según cual sea la gestión que se encomiende.
4.- Se concluye en la formula que se propuso en el contrato.
¿Qué educación o entrenamiento tienes con respecto al trabajo que realizas?
6 años de experiencia litigando en juicios penales de alta complejidad, tanto en Región de Valparaíso como en otras regiones del País, lo que me permite una mejor negociación con Fiscales según sea la situación penal que aqueja al imputado. Mismos años me han permitido consolidar experiencia en otras áreas como litigante activo, tales como en Familia, Civil, como también experiencia extra-judicial, en asesoría a múltiples empresas de todo tipo, mejorando formulas de trabajo, contratos, y defendiendo activamente los intereses de mis representados a fin que crezcan en sus rubros respectivamente.
¿Tienes alguna forma estándar para cobrarle a los clientes, si es así, cuál?
Mis tarifas suelen ser acorde a las necesidades del cliente, por lo que en base a su requerimiento se formula una propuesta de honorarios, la que suele ser ponderada según: Tipo de gestión, características, complejidad, y tiempo de intervención, así se determinan mis valores.
Usualmente, mis cobros más frecuentes comienzan siempre antes del inicio de mi labor, con un pie ascendente entre el 50 a 70% del valor de la gestión requerida, en tanto el saldo restante se pacta en 1, 2, 3 o cuotas a definir, según las características de la intervención a realizar.
¿Cómo empezaste a hacer este tipo de trabajo?
Comencé como procurador en un estudio jurídico dedicado a ley 20.000 y delitos de alta connotación y complejidad, al mismo tiempo tomé tantas audiencias como pude en todas las materias de Familia, en causas Civiles y en Policía Local, áreas que fueron la antesala de mi desarrollo profesional, entregandome experiencia suficiente para abordar con más y mejores herramientas cada desafío profesional que mantengo en la actualidad como litigante.
A su vez, asesoré durante años a una inmobiliaria de reconocido prestigio en la V región, por lo que, por una parte, mantenía activamente una participación en diversos juicios y, por la otra, desarrollaba experiencia en asesorar correctamente a esta empresa, por lo que en ambos campos, tanto de litigante como de asesor, ya sea en escrituras públicas y privadas de contratos, compraventa, cesiones de derecho, rectificaciones, complementaciones, testamentos y más, me han dotado de herramientas suficientes para cubrir ambos campos desde la experiencia.
¿Con qué tipo de clientes has trabajado?
He desarrollado mi profesión con todo tipo de clientes, de toda índole y de diversas capacidades económicas, donde la exigencia y la respuesta en corto tiempo es la demanda más usual en cada causa, allí es donde el factor de explicar al cliente los tiempos de respuesta, tramitación, y los factores que determinan hasta que punto el abogado puede intervenir, resultan esenciales.
¿Qué consejo le darías a un cliente que quiere contratar a alguien en tu área de trabajo?
Informarse oportuna y correctamente, que el abogado explique cada una de las implicancias de la gestión que el cliente necesita, que además, mantenga una formula de trabajo estructurada y planificada, y lo más importante, es que por naturaleza el abogado debe inspirar confianza, comunicación, respeto, y una relación sana desde lo profesional hacia su cliente, debiendo ser reciproco aquel actuar. De tal manera que existiendo esos factores, el cliente puede, con toda libertad, contratar al abogado que cumpla el perfil que desea.
¿Qué debería tener claro el cliente antes de contratar a un profesional como tú?
Que mi trabajo no es, por esencia, de resultados. Se trata de un trabajo de medios, tal como es la medicina, a través de los medios que la ley franquea el abogado intenta obtener un determinado resultado, sin encontrarse este garantizado jamás, por lo que todo cliente mío que tramite una gestión judicial debe entender que yo no garantizo, jamás, ningun tipo de resultado, de lo contrario se incurriría en mentiras e ilusiones, pues adivinar el futuro de una causa aún no es algo posible -ni con los avances científicos- a la fecha. Que en definitiva, mis gestiones nacen desde la verdad como concepto inicial, y en esos términos, contratarme es algo que desde la información clara, real y oportuna, le permite a mis clientes conocer exactamente qué está contratando, qué es posible -y no posible- de realizar, fijando un valor exacto, definido y conocido por las partes.
Desde esa visión, debe tener claro que, siempre existirá por mi parte compromiso, responsabilidad, diligencia, seriedad y proactividad, valores que en todo momento estarán presentes en lo que perdure nuestra gestión.